Peruanos en el Exterior (PEX)

Nuestros compatriotas en el extranjero tienen el derecho de vivir en el exterior con respeto a sus derechos humanos, de recibir un trato justo y no discriminatorio, y de no sentirse permanentemente bajo amenaza de deportación arbitraria.

El Estado Peruano no ha tenido una política consistente de hacer respetar esos derechos ante los Estados donde residen nuestros compatriotas. Los Consulados Peruanos, tampoco han sido promotores del dialogo entre los PEX y el Estado Peruano, y en general las políticas consulares ó diplomáticas no contemplan ni la infraestructura adecuada para atender las urgentes necesidades de los PEX, ni la promoción de la defensa de sus derechos. La Ley de Acceso a la Información Pública ni la Defensoría del Pueblo han sido los garantes necesarios para cubrir el vacío en las condiciones necesarias de participación ciudadana trasversal. Ha fallado la delegación de facultades expresas a otros entes sectoriales en la vigilancia del bienestar común del peruano vulnerable en el exterior.

Proponemos:

  1. Establecer nuevas formas de diálogo entre los PEX y el Estado peruano que permitan apertura democrática, amplia participación y capacitación paralela, al más alto nivel político posible.
  2. Crear el Alto Comisionado Presidencial, que es el ente de enlace entre los PEX y el Estado Peruano, encargado de la organización de las Asambleas, así como de la Secretaria Ejecutiva de la misma.
  3. Reconocer en los PEX a hermanos peruanos que están trabajando denodadamente fuera de su país, y que en muchos casos lo hacen para sostener a sus familias que han quedado en el Perú, por lo que debe dárseles todas las facilidades para mantenerse en contacto con su patria. Esto significa que hay que mejorar los canales efectivos, actualizados de un sistema de información completo y de un sistema de comunicación único que les permitan acceder a los servicios que el Estado peruano debe prestarles en tanto que connacionales.
  4. Revalorización y reubicación de las funciones consulares en lo que a la asistencia a los PEX se refiere, aplicando una reingeniería a los Consulados para organizarlos de manera que puedan cumplir sus funciones a cabalidad. Para ello será preciso dotarlos de los recursos logísticos, redistribución financiera y admisión de recursos humanos nuevos desde la comunidad PEX local con capacidad y conocimiento, para coadyuvar y cumplir satisfactoriamente con las necesidades de los PEX. Por ejemplo: Lograr una atención ordenada, rápida y ejecutiva de los PEX en todas las oficinas consulares. Un aspecto sustancial es que los PEX tengan acceso eficiente a sus Consulados, por lo que es necesario mejorar las centrales telefónicas y el personal de telefonistas, así como establecer el uso eficiente del Internet con la Cancillería, para consultas y trámites. Es necesario eliminar las causas de la dispersión, multiplicidad del gasto presupuestal y la baja calidad de la información produciendo una natural irritación en los PEX el sentirse mal atendidos por su propio Gobierno.
  5. Eliminar toda forma de discriminación, maltrato o subestimación de nuestros compatriotas en los consulados y otros organismos públicos, promoviendo la respuesta oportuna en las quejas, demandas y el acceso a la información, a través de los Consulados, de la Cancillería, de la Defensoría del Pueblo y de la Comisión Legislativa de Relaciones Exteriores.
  6. El Consulado debe mediar para defender al PEX frente a la arbitrariedad, maltrato o discriminación que pueda sufrir por el hecho de vivir en otro país, cuidando particularmente del trato indebido o manipulado que reciben de las autoridades del país en el que se encuentran.

En resumen, el PEX debe sentir que el Consulado peruano es “su” Consulado, que le facilita su relación con el Perú e intercede por él frente a cualquier abuso de que pudiera ser víctima por las autoridades del país donde vive.

Keiko Fujimori